Queda siempre en el Fausto la fuerza de un pensamiento riquísimo y la plasmación de un mito, el último que nuestra civilización ha acuñado con el sello de la gran poesía. —Del prólogo de Francisco AyalaA partir de la figura medieval del doctor Fausto y su fatídico pacto con el diablo, Goethe dedicó varias décadas de su portentosa carrera literaria a la composición de una obra dramática en dos partes: un fragmento de la primera tuvo su edición original en 1790, pero la segunda sólo vería la luz...