Una historia de amor. Una muy especial. No porque la parejita en cuestión sean una chica cis y un varón trans, sino porque la escribió Charo Márquez que sabe escribir humor, alto voltaje sexual y una perspectiva muy particular: Charo puede ser muy analítica, puede construir, por ejemplo, cuando sus personajes se paseen por ese ámbito, escenas de la cotidianidad lésbica con una lucidez que te arranca carcajadas pero sin perder la ternura. También puede hacerte llorar y probablemente llores en...