Existen rumores en torno a La única, de Guadalupe Marín, como que el libro fue financiado por la propia autora y confiscado por poner en evidencia a personajes relevantes del momento como Jorge Cuesta o Narciso Bassols, quien fuera secretario de Educación. Lo cierto es que no logró llegar a los lectores, sea por la falta de acceso a él o por el descrédito que recibió su autora por parte del medio literario. Sin embargo, más allá del cotilleo, las circunstancias que vivió esta...