Por la delicada red del misterio por el sutil círculo aleatorio que gobierna los instantes sublimes que preside la fe, el deseo y la lágrima por ese azar fiero o compasivo fuimos a siervos del signo sometido inquirimos remotos alfabetos que envilecían la lengua de la tribu probamos con retóricas espurias que enfermaban la albia la garganta. Esos años de fuego convulsivo esas tardes de ansia y paradoja conocimos la sed de los cadáveres y bebimos el líquido piadoso.
Скачать книгу «La sed de los cadáveres» Armando González Torres
Чтобы оставить свою оценку и/или комментарий, Вам нужно войти под своей учетной записью или зарегистрироваться