Corre el año 1883 en Chile. La guerra de invasión del país mapuche quedó atrás. Silenciados los cañones y quebradas las últimas lanzas, miles de colonos arriban a la estación ferroviaria de Angol siguiendo la huella de las tropas del ejército. Pronto, el puerto de Talcahuano se verá abarrotado de inmigrantes enganchados en Europa por las agencias de colonización. Caravanas interminables de carretas surcan de mar a cordillera los caminos de la Araucanía. Son los pioneers tras la epopeya. ...