En estas páginas se ahonda en el caudal inestimable de sabiduría espiritual que la Iglesia ha ido atesorando a través de la lectura que durante siglos ha hecho de las Sagradas Escrituras y que custodia celosamente como un depósito capaz de seguir ayudando al hombre de hoy, ávido de acompañamiento.No hay mejores maestros en acompañar que Cristo y la Iglesia, ni un lenguaje más certero ni una experiencia más penetrante que lo que la Revelación nos ha entregado a través de las Escrituras. Un tesoro...