Jayakumar Christian sostiene que, para dar soluciones sustentables a la carencia de poder, la pobreza y la opresión que sufren los pobres, es fundamental cuestionar y redefinir el poder desde la perspectiva del reino de Dios. Solo cuando nos damos cuenta de que ante Dios todos estamos con «las manos vacías» o desposeídos, pueden ser restauradas las relaciones rotas.