La urgencia se transforma día a día en un imperativo de la época. Lejos estaba de imaginarlo cuando en el año 1996 diseñé un espacio de formación para los estudiantes de la facultad de psicología, instalado en las guardias de los hospitales. Tampoco supuse que cientos de alumnos por año transitarían «Clínica de la urgencia».
La propuesta de Inés Sotelo apuesta por la creación de un dispositivo de atención y tratamiento de la urgencia subjetiva siguiendo la lógica y la enseñanza de la experiencia analítica. El lector encontrará no solo una descripción detallada de lo que supone tal dispositivo sino también la exposición de la ética que orienta esta clínica. Se trata, en efecto, de una «política del síntoma» en el sentido que Jacques Lacan dio a ese término. Recibir al sujeto en la urgencia según este principio cambia...