El amamantar, simple y complejo a la vez, se construye esencialmente de a dos: un niño que necesita alimentarse para sobrevivir y una madre que necesita y desea ofrecer su leche. Ambos conforman una relación de mutuo requerimiento en la que el beneficio es doble y que está condicionada por factores biológicos, psicológicos y socioculturales. Es también un camino de mutuo aprendizaje; a través de la lactancia materna, el dar y recibir se fusionan en un vínculo único e irremplazable. Este manual,...