Al igual que la materia está compuesta de energía, el cuerpo está formado de células, de procesos bioquímicos y a través de esas partículas se puede realizar el cambio, esto es, la transformación. Lo mismo ocurre con las emociones y el pensamiento. Cuando la mente, el cuerpo y la energía rompen la sintonía, se fractura el bienestar, que es lo natural del SER.Cada vez que se habla de energías, temas sobre leyes naturales de la metafísica, se genera un morbo. Unos creen y otros no. Si observamos...