Si en Incompetentes (2014) Constanza Gutiérrez construyó un mundo en el que era difícil distinguir dónde y cuándo se daban las frustraciones y esperanzas de un grupo de escolares, en Terriers esto es distinto. Pues aunque ambos libros parecen compartir la supuesta perspectiva ingenua de niños y adolescentes (o el recuerdo de esas experiencias), la fragmentación que la autora experimentó en la novela se transforma en siete cuentos que abordan con consistencia cómo se vivió y se vive en el norte,...