Naomi, con 18 años, entró en una de las salas de reuniones más prestigiosas para los músicos: Sony Records, y salió unos minutos después con un contrato discográfico. Naomi estaba siendo aclamada por los críticos como la «siguiente Céline Dion». Con sus sueños de fama y fortuna en camino, Naomi se codeaba con Randy Jackson, Carlos Santana, Steven Tyler, Britney Spears, Sean «Puff Daddy» Combs, Avril Lavigne y Justin Timberlake. Pero una conversación cambió todo. En el angosto pasillo de un...