"Cuando lees la poesía de Yolanda, no puedes decir que es una poesía que sale del corazón; para salir del corazón tendría que supurar dolor y algo de sangre. Lees y te das cuenta de que su poesía nace de sus ojos; todo en ella vuela, palabras, símbolos e, incluso, el ritmo irregular del verso. Si, en algunas ocasiones, ese vuelo amenaza con perder altura y tocar tierra, un viento leve, siempre leve, lo empuja de nuevo hacia las alturas, de nubes, pájaros y cumbres. Poesía que está siem¬pre...