Este libro muestra cómo el surgimiento del Canal del Dique y la consolidación del río Grande de la Magdalena, como la principal arteria fluvial en tiempos de la Colonia, inciden notoriamente en la configuración de una subregión muy singular: el Bajo Magdalena. La aparición de los puertos fluviales de Tenerife, Barranca Nueva, Calamar, Remolino y otros hechos que han resultado importantes para el afianzamiento poblacional de la región de estudio.